En la vida cotidiana el significado de la palabra “hijo” es obvio, pero en la Ley de Inmigración este término tiene unos matices importantes que no siempre son congruentes con el sentido común. En este número intentaremos resumir este término básico.
Es importante determinar quién es un hijo porque los padres que son ciudadanos o residentes legales de Estados Unidos pueden inmigrar a sus hijos, así como los hijos mayores de 21 años de edad que son ciudadanos de este país pueden inmigrar a sus padres. Además, en ciertos casos, los hijos de ciudadanos de Estados Unidos adquieren automáticamente la ciudadanía Norteamérica y tienen, en muchos casos sin saberlo, lo que comúnmente se conoce como la “doble ciudadanía.”
¿Qué es un “hijo”?
La situación más fácil es del hijo nacido dentro de un matrimonio. En este caso, los hijos se consideran como tales para todo lo relevante a la Ley de Inmigración.
Si el hijo nace fuera del matrimonio, siempre será considerado como “hijo” de la madre para los propósitos de la Ley de Inmigración. También será considerado como “hijo” del padre si el padre estableció una relación de “buena fe” con el hijo antes de que el último cumpliera los 21 años. Entre los factores que pueden tomarse en cuenta para determinar si existe tal relación de “buena fe” son: si el padre reconoció al hijo, si lo ayudó en forma económica o tuvo contacto con el hijo durante su niñez a través de visitas, cartas, regalos, etc.
Los hijastros se consideran “hijos” de acuerdo a la Ley de Inmigración si el padrastro o la madrastra celebró el matrimonio con el padre biológico del hijo antes de el hijo cumpliera los 18 años de edad. En estos casos, si el padrastro o la madrastra es ciudadano o residente legal puede inmigrar a su hijastro sin la necesidad de adoptarlo, y si el hijastro es ciudadano de este país, podrá solicitar a su padrastro o madrastra una vez que cumpla los 21 años. Sin embargo, no se adquiere la ciudadanía automáticamente o la “doble ciudadanía” por virtud de tener un padrastro norteamericano.
El caso más difícil es de los hijos adoptivos. Para obtener beneficios de acuerdo a la ley de inmigración la adopción debe haber sido finalizada antes de que el hijo cumpliera los 16 años de edad. Existen muchos otros requisitos para poder inmigrar a un hijo adoptivo que no podemos detallar en este artículo.
Si usted considera que puede tener derecho a un beneficio de inmigración de acuerdo a lo que hemos explicado en este número, recomendamos que se ponga en contacto con un abogado de inmigración.
