El embrujo de una gran fiesta
Una luminosa magia sobrevuela cada uno de los rincones de ese espacio impreciso que nos rodea y, como el rocío madrugador, se posa en la mirada, en los labios, sonrojando las mejillas de una calidez festiva. El tiempo se alarga y nos ofrece más distancia entre minuto y minuto para poder disfrutar con amigos y/o familiares, cada cita es muy especial y queremos llegar a ella muy guapas, realzando los rasgos más atrayentes con el tenue apoyo que nos brinda el maquillaje.
Y en esa fiesta nuestra belleza lucirá radiante si le damos un toque especial a nuestro maquillaje.
Dentro de unas horas tu presencia atraerá todas las miradas. Estarás fresca, relajada, resplandeciente, lista para disfrutar de toda una noche de fiesta.Pero antes de llegar a la fiesta has puesto especial cuidado en todo un plan de belleza que comenzó unas horas antes, en el mismo momento en que abriste el grifo de agua caliente para llenar la bañera y regalarte un perfumado baño que te ayudará a relajarte. Después una buena crema hidratante que regenerará la piel convirtiéndola en pura seda. Con el cabello has hecho otro tanto, ha sido lavado con un champú suave, una mascarilla capilar, enriquecida con queratinas y aceites esenciales, lo ha hidratado y brillando con reflejos de puro sol, con algunos toques de maquillaje capilar quedará vestido para la gran ocasión.
Ahora toda la atención se centra en tu cara que muestra una luz increíble porque surge de desde tu propio organismo, gracias a una dieta equilibrada. Un aspecto saludable al que también contribuye ese optimismo que recorre todo tu cuerpo y se refleja en tu rostro.
El primer paso a dar es deshacernos de esas células muertas que se fijan en las capas externas de la piel, dándole un aspecto apagado y mustio. Una crema exfoliante se encargará de esta tarea, después una buena mascarilla purificadora le dará nuevos bríos. Una vez limpia de toda impureza, incluso los puntos negros que tanto molestan, hay que darle una buena inyección de energía con una intensa hidratación, para ello se pueden elegir geles, cremas regeneradoras, sueros vivificantes, etc. También existen una serie de cosméticos con efecto “lifting”, sus componentes tensores mitigan los rasgos de fatiga que el largo día ha dejado en nuestro rostro, alisándolo durante varias horas.Variadas cajitas se sitúan en la repisa que está delante del espejo, son los distintos elementos de maquillaje que van a realzar tus facciones hasta hacerlas deslumbrantes. Porque al aplicarte el maquillaje se va a propiciar una transformación, pero siempre dentro de tu propia personalidad. Cada año surgen nuevas tonalidades y efectos cosméticos, lo que debes hacer es elegir aquellos que no van a perder de vista la armonía general de la persona, sino que van a aunar la moda con la belleza natural. Buscamos resaltar, no disfrazar, aunque no vienen mal algunos productos que mitigan la fatiga, atenúan las ojeras o esconden ese molesto e inoportuno grano de última hora.
Después de hidratar la piel y poner una crema para alisarla y fijar el maquillaje, puedes aplicarte un disimulador de ojeras, si lo necesitas. Una base de maquillaje dará un tono uniforme a todo el rostro, procura elegir un color acorde con tu propio tono de piel para que no destaque, ya que parecería antinatural. Para matizar y mantener el maquillaje se pueden utilizar polvos compactos, que vienen acompañados de brillos y transparencias que crearán un resplandor totalmente glamuroso. Les ha llegado el turno a los ojos, maquíllalos de forma especial, hazles protagonistas, pero no los recargues, y sobre todo cuidado con las pestañas, si presentan pegotillos van a resultar antiestéticas. Bajamos hacia los pómulos, pasando una suave brocha que los acaricia con suaves toques metálicos e irisados, ¡estamos de fiesta!. Los labios nos esperan porque saben que van a ser el broche de oro, dedícate a ellos con especial atención. Primero se perfilan, después se le da color y, por último si te gusta, se le pone brillo.Si en esta fiesta quieres centellear con una luz intensa y esplendorosa. Brillante oro y sombras perladas hacen resaltar los párpados, mientras los colores metálicos e irisados, como alas de mariposa, dan luminosidad a las mejillas. Pero la luminosidad no se asienta sólo en los pómulos, sino que variados componentes iluminadores y purpurinas forman parte de polvos compactos, sombras de ojos, brillo de labios, etc. Un toque metalizado para comenzar un radiante tercer milenio.Sin alejarnos de los toques iluminadores, podremos sentirnos hadas e ir dejando un halo de malvas, rosas o lilas, pequeñas partículas brillantes que se adhieren a la piel como un suave polvo de estrellas. Aunque también puedes hacer que el misterio te acompañe, embelleciendo tu rostro con discretos tonos claros, alargando los ojos con una sombra grisácea que incluye una discreta caricia de purpurina, y poniendo toda la fuerza del color granate con toques plateados en los labios.Son muchas las combinaciones que puedes crear con los productos que te ofrecen las distintas marcas comerciales. Son favorecedores a la par que regeneran la piel, proporcionando al rostro un toque natural. Al elegir uno u otro busca el consejo de un especialista para que te oriente en cuales te van a favorecer más y van a hacer que toda tu personalidad aflore en suaves toques de color y brillo. Tal vez tu estilo vanguardista te anime a utilizar tonos atrevidos, que no serán los que elijas si buscas mantener tu estilo clásico, ya que preferirás los grises claros, lápiz labial muy claro y con efectos metalizados. Y así, hasta el infinito porque cada persona es única y especial y cada toque de maquillaje potenciará sus rasgos.Ya estás vestida y lista para salir a pasártelo fenomenal. Además, el perfume y ese tatuaje de pedrería que muestra tu cuello, realzan aún más tu imagen. Sí, ¡estás muy hermosa!. Cómo dice un dicho: “Elegante a la par que natural”.
