¿Por qué llora el bebé?
Aunque es corriente que el bebé llore asiduamente (pues es su única forma de comunicarse), no deja de ser una motivación de inquietud para padres novatos, principalmente cuando nada parece calmar ese llorar.
Tras el llanto del bebé hay siempre una escasez insatisfecha (necesita comer, que lo cambien, dormir…), una queja (por el ruido, por una molestia física), o un simple desahogo (para liberar tensiones).
Como ves, llorar no tiene por qué esconder ningún problema grave. De hecho, durante los primeros meses de vida, lo normal es que llore entre una y tres horas al día, ¡y eso no significa que no lo estéis cuidando bien!.
¿Quieres entender mejor por qué llora y qué hacer para solucionarlo?
Las causas más habituales de llanto son las siguientes:
• Hambre • Frío o calor • Incomodidad
• Pañales sucios
• Enfermedad • Sueño • Soledad • Aburrimiento • Exceso de estímulo • Ruido • Tensión
Normalmente, en pocas semanas los padres aprenden a detectar cómo escada tipo de lloro, o al menos, a reconocer cuando es algo urgente (hambre, dolor), y cuando es algo secundario (tensión, aburrimiento).
Hay tres tipos de lloro bastante típicos, son los siguientes:
• Hambre: Empieza de modo irregular y va creciendo progresivamente en fuerza y continuidad. Llora a períodos cortos, con una tonalidad más bien grave y con intensidad variable. • Dolor: De inicio brusco, es fuerte de entrada, como un grito largo y agudo. • Enfermedad: Gemidos débiles y prolongados (salvo cuando la enfermedad causa dolor intenso).
