Dos mares en una sola costa (el Mar Menor y el Mediterráneo), impresionantes acantilados, paradisíacas y solitarias playas de interminable y blanca arena, animados puertos y calas salvajes de aguas de espejo, más de 3.000 horas de sol al año y suaves temperaturas (incluso en invierno), con una media anual de más de 18ºC. Así es la Costa Cálida, el destino ideal para pasar unos inolvidables días de descanso sea invierno o verano.
Desde el pueblo pesquero de Águilas hasta las blancas dunas de la playa de El Mojón, en San Pedro del Pinatar, se extienden kilómetros y kilómetros de playas y calas solitarias que aguardan al bañista, al navegante, al pescador y al submarinista. Hay además encantadoras y pintorescas localidades pesqueras, como La Azohía o Cabo de Palos, donde perderse unos días; puertos como el de Mazarrón para pasar una divertida noche y disfrutar de una magnífica gastronomía tras un día de playa; paraísos naturales, únicos en el Mediterráneo, a la altura de las playas de Calblanque y Calnegre… y uno de los complejos turísticos más preciados del Mediterráneo: La Manga del Mar Menor, un paraíso entre los dos mares, de playas infinitas de fondos de arena y aguas cristalinas, dotado de una magnífica infraestructura hotelera.
Los amantes de los deportes náuticos encontrarán además uno de los mejores lugares del mundo para practicar vela, piragüismo, natación, esquí, motonáutica, flysurf, windsurf, catamarán, toda clase de actividades náuticas en los numerosos clubes, puertos y escuelas deportivas. La Estación Náutica del Mar Menor y los consorcios de Águilas y Mazarrón ofrecen la posibilidad de alquilar material, contratar cursos de vela y reservar alojamiento en unas condiciones muy ventajosas.
Lugares turísticos de la Costa Calida:
San Pedro del Pinatar
El Parque regional de Las Salinas y Arenales de San Pedro del Pinatar es, cada verano, parada obligatoria de los flamencos rosados que viajan al norte de África. Anímate a recorrer el humedal más grande de la región donde viven zampullines, gallinetas, gaviotas, albatros, garzas reales, lechuzas y el fartet, pequeño pez endémico del litoral levantino. Para conocer el parque a fondo visita el Aula de Interpretación que se ubica en el Centro de Investigación y Conservación de los Humedales “Las Salinas”, donde se puede contemplar una maqueta del mismo, diversas fotografías del ecosistema y unidades didácticas sobre su fauna y flora.
Si sufres dolencias relacionadas con huesos y articulaciones no dudes en ir a las charcas de “Las Salinas”, en Lo Pagán y aplicarte los conocidos “barros de Mar Menor”. Fruto de la sedimentación, en las arenas y en el fondo de este pequeño mar se generan unos lodos con gran poder de absorción, acción mineralizante y efecto de cicatrización. Son muy adecuados para tratar las patologías de la piel y en casos de reumatismo, artritis, gota o rehabilitaciones tras una rotura ósea. También son utilizados como antiinflamatorio. Diversos centrod de talasoterapia del Mar Menor utilizan estos lodos como base de diversos tratamientos terapéuticos y de belleza corporal.
San Javier
En verano es típico de esta zona recorrer cualquiera de los mercadillos que se celebran en los pueblos del Mar Menor, en los que podrás adquirir salazones, verduras, frutas y ropa, entre otras cosas. En San Pedro del Pinatar se celebra los lunes; en La unión, Los Belones y Los Alcázares los martes y los miércoles en Cartagena, Santiago de la Ribera y El Mirador. San Javier, Los Urrutias y Lo Pagán tienen mercadillo los jueves y El Algar los viernes. Los domingos no dejes de pasar por los mercadillos de Cabo de Palos, Los Nietos y San Javier.
Sin alejarte de la costa, en bicicleta, por sendas, caminos de tierra o por una antigua cañada real ¿Cómo prefieres recorrer el Mar Menor? Existe una agradable ruta de 56,4 kilómetros de longitud que no ofrece dificultad y puede realizarse en unas 7 horas. Hay un tramo en la zona de las Encañizadas del norte de La Manga, en el que varios canales de agua impiden seguir en bicicleta.
Los Alcázares
A orillas del Mar Menor, en el municipio de Los Alcázares, podrás beneficiarte de las propiedades curativas de los baños termales del Hotel Balneario La Encarnación. Construido en 1904, este recinto, que sólo abre en verano, conserva la idiosincrasia característica de principios de siglo. El balneario está dedicado exclusivamente a baños de agua marina, que se calienta a la temperatura conveniente para cada persona. Las bañeras, de mármol, se hallan en la planta baja y son auténtica obra de artesanía.
Conoce y recorre el Mar Menor a bordo de alguna de las embarcaciones que durante todo el año hacen excursiones marítimas por este mar de aguas tranquilas. Una de las rutas navega y costea las 5 islas del Mar Menor, mientras que otra opción es navegar desde este pequeño mar hasta el Mediterráneo y llegar a la Isla Grosa, donde la visión submarina del barco permite admirar los hermosos fondos marinos. La travesía dura aproximadamente dos horas y en ella podrás disfrutar de un aperitivo a bordo del barco.
Cartagena
Aprovechando los restos de parte de la muralla que defendía la antigua Qart-Hadast se ha construido un centro de interpretación que te acercará a las guerras púnicas. La Muralla Púnica traslada a mayores y pequeños a la época de Amílcar, Asdrubal y Escipion el Africano, personajes que a través de proyecciones te sumergerán en la historia de uno de los escasos restos púnicos del mundo.
Baila en Cartagena al son de las distintas músicas del mundo. El Festival Internacional La Mar de Músicas, considerado uno de los mejores del mundo, te acerca cada año, siempre en el mes de julio, variadas propuestas culturales de diversos paises. Un certamen que conjuga la música con muestras de cine, exposiciones y literatura. Con escenarios de todo tipo, casi siempre al aire libre y mirando al mar. Una cita imprescindible para los amantes de la cultura.
Haz turismo de altura en el ascensor panorámico de Cartagena Puerto de Culturas y descubre unas vistas únicas de ciudad. Se trata de un elevador de 45 metros que sube hasta la azotea del Castillo de la Concepción, actual Centro de Interpretación de la Historia de Cartagena. Anímate y descubre esta ciudad ha visto pájaro.
La Manga del Mar Menor
El Parque Regional de Calblanque te permite disfrutar del mar y la naturaleza en un mismo escenario, considerado uno de los espacios naturales más bellos de la Costa Cálida. Una combinación de largas y solitarias playas arenosas y una abundante vegetación, compuesta por palmito, cornical, sabina mora, pinares, algarrobos e higueras. También conviven en esta zona cigüeñas, flamencos, gaviotas, búhos reales y águilas perdiceras, que podrás admirar desde los observatorios de aves del parque. Para los más activos existen varias rutas de senderismo y excursiones a caballo.
Sumérgete en los fondos de una gran reserva y observa especies únicas. Buceo junto a antiguos barcos hundidos que se conservan en muy buen estado y que hoy sirven de morada a barracudas, atunes, moreras y congrios. Para los más experimentados submarinistas, la reserva marina de Cabo de Palos-Islas Hormigas es un espacio medioambiental casi inalterado muy apreciado, pero recuerda que es necesario tener conocimientos previos para bucear. Si no es así, recuerda que en las escuelas de buceo podrás hacer un cursillo que te permitirá descubrir con seguridad los secretos del mar. La zona de Cabo Tiñoso en Cartagena es también un lugar muy apreciado por los aficionados de buceo.
Puerto de Mazarrón
¿Alguna vez has avistado cetáceos en alta mar? La bahía de Mazarrón es una de las mejores localizaciones para realizar esta actividad. Te proponemos una excursión marítima a bordo de una goleta turca remodelada de 20 metros de eslora. Además de salir a navegar, tendrás la posibilidad de avistar cetáceos como el delfín común, listado y mular, el calderón común, el calderón gris y, de forma más ocasional, el rorcual común y el cachalote. No te lo pienses, la excursión en barco puede ser de un día, un fin de semana o una semana.
Descubre los encantos de Mazarrón a través de 20 rutas y sendas que se hallan perfectamente señalizadas y podrás realizar a pie, a caballo, en bicicleta o en coche.
Águilas
Descubre los encantos del paisaje protegido de Cuatro Calas, uno de los afloramientos volcánicos más peculiares de la Costa Cálida. Calarreona, La Higuerita, La Carolina y Los Cocedores son los nombres de las cuatro calas. En la última podrás observar unos pequeños diques construidos con piedras para cocer el esparto, lo que constituyó la primera transformación de un producto que fue la base de la economía local de la zona durante mucho tiempo. Además de la interesante vegetación litoral y la extraordinaria calidad de las playas, lo que más llama la atención es la singular geología de la zona. Los sucesivos hundimientos y levantamientos que esta costa ha sufrido en diferentes periodos geológicos permiten encontrar gran cantidad de fósiles marinos incrustados en las areniscas y conglomerados de sus promontorios. Los agentes erosivos han modelado estas rocas dando lugar a verdaderas esculturas naturales. Incluso el hombre participó de esta “bacanal pétrea” excavando en la roca su viviendas trogloditas.
Habitada por fenicios, griegos y romanos, la Isla del Fraile, llamada así porque recuerda la capucha de un fraile franciscano, te espera a dos millas de Águilas, en la Bahía del Hornillo, con una interesante y antigua historia. La isla está rodeada por una muralla romana del siglo IV y también conserva ruinas de principios del siglo XX. Los arqueólogos han encontrado ánforas y platos del siglo IV y cerámica de la variedad “Sigillata Gris”. En la antigüedad también fue productora del licor Garum. Ahora acoge una de las mayores colonias de gaviotas del Mediterráneo.
Fuente: www.murciaturistica.es
