Ojos aterciopelados, chispeantes, maliciosos, tiernos, seductores…
Dicen que los ojos son el espejo del alma, conseguir una mirada seductora y que a la vez transmita diversos sentimientos se puede lograr con el maquillaje adecuado.
El maquillaje de las pestañas y los párpados es fundamental para dar expresividad a la mirada. Para conseguir una mirada llena de luz opte por sombras difuminadas y de un color diferente al de los ojos. Las sombras contrastadas realzaran el iris y para que los rasgos no se endurezcan no realice trazos muy precisos al maquillarse.
Maquillar los ojos con dos sombras diferentes, una más clara y otra más oscura, sirve para aportar luz y corregir la forma del ojo respectivamente. De esta manera puede jugar con luces y sombras para vestir la mirada. Las nuevas texturas, lisas y difuminadas, permiten, además, trabajar los colores sin cargar la mano.
REGLAS DE ORO PARA LAS SOMBRAS DÚO
No basta con combinar colores para conseguir los efectos deseados, es fundamental también que estos se apliquen correctamente para evitar una mirada artificial y que no trasmita nada.
1. Empolve cuidadosamente los párpados con los polvos libres. Para no emplear un exceso de producto, frote primero la borla contra el dorso de la mano.
2. Con la punta más fina del aplicador, tome la sombra más oscura y ponga un punto de color en el rabillo externo del ojo y en el borde de la parte móvil del párpado superior. Entonces aplique dos o tres puntos más, siguiendo el arco ciliar (justo encima de los ojos) hasta la mitad del pliegue del párpado.
3. Difumine el color aplicado de esta forma en el hueco del arco ciliar para obtener una aureola de luz un poco oscura en el párpado móvil superior.
4. Seguidamente aplique el color claro difuminado desde el exterior hasta el interior, por debajo de la ceja, uniendo los tonos.
MAQUILLAR LOS OJOS SEGÚN SU FORMA
Redondos o salientes
1. Aplique la sombra de párpados clara en toda la parte móvil del párpado superior.
2. Dibuje el ángulo externo con un punteado de sombra oscura. Difumine hacia el interior y luego, ligeramente, hacia el exterior en dirección ascendente.
3. Haga un trazo fino con lápiz en el párpado superior, a ras de pestañas, y ensánchelo hacia el ángulo externo.
4. Sombree ligeramente el ángulo externo del párpado inferior.
Ojos hundidos
1. Aplique la sombra clara en toda la parte móvil del párpado superior.
2. Sombree el ángulo externo con el color oscuro.
3. Haga un trazo difuminado con el lápiz en el ángulo externo del párpado superior, a ras de pestañas. Sombree con el difuminador, del mismo lápiz.
Ojos demasiado separados
1. Aplique la oscura en el interno del ojo difuminando hacia el interior.
2. Extienda la clara desde el párpado al ángulo externo.
3. Haga un trazo fino con el lápiz en todo el párpado superior, a ras de pestañas.
4. Si lo prefiere, dibuje un trazo con lápiz Khôl en el párpado inferior.
EL LÁPIZ Y LA MASCARA DE PESTAÑAS
Lo primero que debe hacer es peinarlas correctamente, tanto la parte superior como la inferior. Es preciso que se centre en la parte externa de las pestañas ya que así conseguirá agrandar el ojo y un resultado más intenso.
Los lápices de ojos suelen tener, en un extremo, una mina perfecta para trazar, y, en el otro, un pincelito para difuminar. Un perfecto “dos en uno” para el maquillaje rápido y eficaz.
Para pintar el ojo con el lápiz es preciso que siga unos pasos y que repita la operación no sólo en la parte superior sino también en la inferior pero teniendo en cuenta que apenas debe resaltarse.
1. Caliente la mina haciéndola rodar de lado sobre el dorso de su mano y aplique un poco de color en el dorso.
2. Dibuje 3 ó 4 trazos a ras de pestaña, desde el exterior hacia el interior. El borde de las pestañas del ángulo interno del ojo apenas debe resaltarse.
3. Con el pincelito vuelva a tomar un poco de color del dorso de su mano, (previamente lo ha puesto).
4. Rellene, difumine, unifique y funda los trazos.
