Trucos de jardinería: el riego

Tabla de contenido

Como hacer para que las plantas sobrevivan en nuestra ausencia

Muchas personas eligen dejarlas al cuidado de familiares o amigos. Otras, sin esa posibilidad, no saben qué hacer con ellas durante las vacaciones. Recomendaciones infalibles para volver y encontrarlas igual que siempre.

Uno se va de vacaciones y deja atrás muchas cosas: El stress diario, algunas responsabilidades, algunas presiones y los problemas en general. Sin embargo hay otras cosas que no se deben abandonar, por ejemplo las mascotas y las plantas.

¿Cómo hacer para no descuidarlos en la ausencia? Se sugieren alguna técnicas de mantenimiento que son indispensables para mantener la salud de las plantas: se deben guardar en un claro en donde no les dé el sol, usando bolsas de plástico para guardar ropa, de la que dan en las lavanderías, fabricando una especie de terrario que conserve la humedad por mucho tiempo.

No se deben mojar las hojas y no se tiene que saturar de agua. Que no quede agua en los platos, porque se pudrirían las raíces. Agregar tres o mas estacas de bambú que se venden en ferreterías, alrededor de cada borde de tiesto para que sostengan la cubierta de polietileno; o bien un par de perchas dobladas para tiestos chicos, y luego hacer un nudo en el fondo de la bolsa para introducir la o las plantas.

También se puede tomar una cartulina de 8 por 3 centímetros, se la dobla a lo largo y se la pega con cinta adhesiva formando una “T” en lo alto de cada estaca. esto impide que la estaca perfore el plástico y lo separa de las hojas de la planta. Luego se cierra en la parte superior y se forma un terrario casero pero efectivo.

En el caso de que la planta sea de grandes volúmenes, conviene abrir la bolsa convirtiéndolas en laminas planas y hacer una “tienda de campaña” para la tierra de las macetas: Poner cinta aisladora en un borde, alrededor de la parte alta del recipiente, regar la planta normalmente y luego recoger el plástico en la base de los tallos y pegarlo con cinta adhesiva de manera que la menor cantidad de tierra posible, entre en contacto con la tierra.

Si el recipiente es demasiado grande, se debe hacer un habitáculo de estacas y laminas de plástico delgado, rígido y transparente, para completar una tienda. Todo se puede llegar a conseguir a precios económicos en ferreterías.

Otra variante es poner las plantas pequeñas dentro de las piletas de lavar en la cocina (también en bañeras o duchas) y regarlas. Poner un plástico transparente por encima sellándolo con cinta en los bordes, luego instalar una lamparita de 150 watts a 45 centímetros del plástico, y con un encendido automático para que de luz 10 horas diarias.

Al regreso abra las bolsas pero deje las plantas en el lugar un par de días y riéguelas si es necesario para que vuelvan a acostumbrarse a un nuevo ambiente.

Revise que no tengan insectos y vuelva a mimarlas como lo hacía antes, en una nueva etapa, más estresante para usted pero con la fiel compañía de la planta que sigue a su lado.

Unos trucos…

Asegurar el riego de las plantas durante las vacaciones

Deberemos cortar una tira de gamuza por cada maceta que queramos regar. A continuación enterraremos no muy profundamente el extremo de una tira en cada una de las macetas, mientras que el extremo libre lo sumergiremos en un recipiente con agua abundante. De este modo, las plantas irán absorbiendo el agua que necesitan durante nuestra ausencia. En el caso de que tengamos muchas macetas o estén muy dispersas por la casa deberemos disponer de varios recipientes de agua, de modo que cada tira de gamuza esté conectada con algún recipiente de agua. Si tan solo tenemos que mantener el riego en una maceta, podemos introducir una mecha de algodón por el orificio de drenaje y dejarla sobre un recipiente con agua.

Consejos para ahorrar agua

  •  Instala riego por goteo, a poder ser, automático.
  • Usa especies resistentes a la sequía (hay que regarlas menos).
  • Coloca acolchados en la base de las plantas para evitar la evaporación. Por ejemplo cortezas de pino, paja, mantillo, hojas, áridos y gravas, etc.
  • Sombrea las especies más sensibles al calor.
  • Cubre el suelo con plantas, consigue sombra con los árboles, trepadoras (pérgolas).
  • Agrupa las plantas por su demanda de agua: alta, media o poca necesidad. En el borde del césped planta las que más necesite.
  • El suelo se debe dejar secar moderadamente entre riegos para favorecer que las raíces busquen agua en profundidad y así se hagan más resistentes al riego escaso o nulo.
  • El riego por la madrugada o al atardecer es lo mejor. Hay menos evaporación y la planta la toma mejor.

Enriquecer el agua para el riego

Si reutilizamos el agua del acuario o la de un jarrón con flores cortadas estaremos aportando a la planta una serie de nutrientes extras muy beneficiosos. Lo mismo sucede con el agua que utilizamos para cocer legumbres y verduras o para escalfar huevos. Las vitaminas y sales minerales que aportan estas aguas recicladas mejorarán el crecimiento de las plantas. Es importante, en cualquier caso, que esperemos a que el agua se enfríe hasta estar a temperatura ambiente.

Recuperar plantas dañadas por exceso de riego

Es imprescindible trasplantar el ejemplar dañado para sustituir la tierra con exceso de humedad por otra que reúna las condiciones necesarias para la planta. Después de sacarla del tiesto original se podarán las raíces que se hayan podrido, se colocará en un nuevo recipiente que disponga de un buen drenaje y se controlará la cantidad de agua que se echa en la maceta. A continuación, colocaremos la planta debajo de un plástico que evitará que el agua se evapore y que mantendrá la parte superior de la planta húmeda mientras se recuperan las raíces. Dos veces al día sacaremos la planta de debajo del plástico y dejaremos que se airee.

Riego de árboles

Cuando se hace una plantación de frutales, por ejemplo, y hay escasez de agua, se introduce a unos 30 centímetros de la planta un tubo de plástico que llegue hasta las raices. Con echar un solo caldero se riega, ya que así se aprovecha el agua en su totalidad.

Saber cuando regar

Para saber si hay que regar o no tus plantas en maceta, introduce el dedo en la tierra y comprueba si está húmeda. Cogerle el tranquillo a esta técnica es fundamental. Recuerda que con el riego siempre es mejor quedarse corto que pasarse. El exceso produce pudrición y eso ya sí que no tiene remedio.

Solucionar problemas por defecto de riego

Cuando aparecen grietas en la tierra debido al defecto de agua es conveniente que añadamos unas gotas de lavavajillas biodegradable al agua de riego, ya que la tierra agrietada tiene menos capacidad de absorción y el agua, por si sola, no serviría para empaparla convenientemente.

Cuidados plantas de interior | Plantas de interior sanas | El balcón | Macetas  | Consejos flores | Jardines y terrazas
Ir arriba